sábado, 11 de abril de 2015

Empanada casera de atún y huevo duro

Por Ana Alonso Muñoz



Algunas veces, al leer una receta de cocina nos da pereza solo el pensar cómo empezar con ella pero nos morimos de ganas de probarla. Hacer una empanada casera es mucho más fácil de lo que parece y el resultado puede ser muy sorprendente. Así que solo hay que quitarse la pereza y meter las manos en la masa. Para hacer una empanada no necesitamos la Thermomix, ni una amasadora ni complicados utensilios de cocina. Solamente teniendo cuidado de no mancharse mucho a la hora de amasar no resulta nada complicado, y la variedad de rellenos que podemos preparar depende sólo de nuestra imaginación: carne, setas, gambas, queso con lacón e incluso de crema pastelera o chocolate. En este caso os mostramos la más típica: la empanada de atún con huevo duro.






INGREDIENTES



Masa                                                                                                 Relleno
1 huevo mediano                                                                               3 pimientos verdes
1 vaso de vino blanco (100ml)                                                          1 pimiento rojo
1 cucharada de mantequilla                                                               1 cebolla
1 cucharada de aceite de oliva                                                           3 latas de atún
1 cucharadita de levadura Royal                                                        3 huevos duros
1 cucharadita de sal                                                                            tomate frito
harina de fuerza (la que admita)                                                         aceite
                                                                                                            sal


ELABORACIÓN

Puede trabajarse directamente encima de la mesa pero es más fácil y limpio si empezamos en un bol grande. Primero se hace un volcán con una taza y media de harina y en el centro se casca el huevo y se ponen el resto de los ingredientes. Con mucho cuidado, sin mancharse más que tres dedos (corazón, índice y pulgar) se van haciendo movimientos circulares para que se integren bien los ingredientes líquidos y se va añadiendo más harina poco a poco hasta que la masa se despega de las manos. Una vez puede trabajarse sin problemas, se saca del bol a la mesa (limpia y enharinada) y se amasa durante unos 5 minutos.

IMPORTANTE: No debe ser durante más tiempo porque podría quedar correosa. No es necesario reposo ya que no es una masa fermentada.



Se hace una bola y se divide en dos porciones aproximadamente iguales, con una de ellas se forra un molde estirando con un rodillo (o un vaso de tubo). Debe quedar un borde por fuera para poder cerrarla. Si se abre alguna grieta debe taparse con otro trozo de masa y pegarlo con ayuda de agua.



El relleno puede ser una base de verduras y atún. En este caso son tres pimientos verdes, uno rojo y una cebolla. Se pican bien finito y se hacen al microondas tapados con film transparente, en tandas de 6 minutos a máxima potencia. En 18-20 minutos deberían estar hechas pero dependerá de la potencia que tenga el aparato.


También podrían pocharse en una sartén con un chorro abundante de aceite hasta que estén bien hechas. Se incorpora a las verduras 3 latas de atún y 100 gramos de tomate frito (si es casero, mejor) y se mezcla bien.

Se rellena la base con parte de la mezcla de verduras y atún, se colocan con tres huevos duros en láminas y se cubre con más mezcla de verduras. Con la otra mitad de masa que estaba reservada se cubre la empanada. Aquí es importante cerrar bien las dos capas de masa para que no salga nada del relleno fuera. Puede hacerse como se quiera pero la mejor técnica es la conocida como repulgue. En este vídeo puedes ver como se hace en empanadas criollas. Una vez bien cerradas las dos capas de masa se pincha la superficie con un tenedor y se hace un agujero para que pueda salir el vapor. Con ayuda de papel de aluminio o de horno se hace un tubo para que no se cierre el agujero, una especie de chimenea. Se pinta con huevo batido y se hornea a 180° C durante unos 40 minutos, con calor arriba y abajo. El último rato (unos 10 minutos) puede ser solo calor arriba para dorarla un poco más.







Ya solo queda disfrutarla en caliente, esperar un poco a que temple o prepararla de un día para otro. Es perfecta para un día de monte o para llevar a un potluck, esas fiestas en las que cada invitado lleva su propio plato para compartir con los demás. Os animo a intentar hacerla, el resultado no dejará indiferente a nadie. Dejad vuestros comentarios si os habéis animado a hacerla y no dudéis en preguntar cualquier duda que os surja.




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